martes, 31 de mayo de 2011

Antigua y Mazatenango

El día 17 de mayo salí de Panajachel para Antigua, donde estuve cuatro o cinco días. Después pasé un par de días en la Ciudad de Guatemala (la llaman Guatebala por los altos índices de criminalidad que padece en los últimos años) y de allí viajé  hasta Mazatenango, donde pasé dos días conociendo al equipo de la asociación Payasos que trabaja en esa zona.

Los días de Antigua fueron tranquilos. Caminé por las calles de la ciudad colonial, escribí algunas cosas, leí los paneles de la exposición Agua, Ríos y Pueblos y pasé bastantes horas en la biblioteca municipal. 

La exposición Agua , Ríos y Pueblos me impresionó. A través de paneles situados estas semanas en la plaza de la municipalidad y de un ciclo de cine (del que yo pude ver una película), trata de visibilizar algunos de los grandes conflictos del agua en diferentes lugares del mundo, denunciando políticas y proyectos irresponsables que ignoran o desprecian los impactos ambientales y sociales que provocan. También muestra las luchas de los afectados, que se organizan en los distintos rincones del planeta para tratar de acceder a este recurso básico, un derecho humano al que todo el mundo debería tener acceso. Os animo a echar un ojo a esta página: http://www.aguariosypueblos.org/

Las horas de biblioteca fueron para tratar de averiguar más sobre la historia de Guatemala y, especialmente, sobre el conflicto interno. Siento la necesidad de entender y en los libros encontré algunas respuestas. Especialmente interesante (y duro) es el informe de la Comisión para el Esclarecimiento Histórico, grupo de trabajo que se formó tras los Acuerdos de Paz para esclarecer, como su nombre indica, qué había pasado exactamente en los 36 años de guerra civil que asoló al país. Meteré una entrada sobre este tema.

Aparte de estas cosas, la ciudad de Antigua me pareció muy bonita y bastante artificial. No tiene nada que ver con el resto del país: es limpia y perfecta como el decorado de una película. Está llena de turistas. También de restaurantes y tiendas muy cuidadas y estilosas... que podrían estar en cualquier barrio chic de capital europea. En Madrid al estilo la Latina o Malasaña. En Barcelona, como los barrios del centro, no recuerdo bien los nombres.

Lo más auténtico que ví en Antigua fue el mercado, donde me gustaba desayunar. Allí casi todos son locales y entre los puestos de frutas y ropa y los comedores sí se percibía el pulso de la vida, pum pum, más allá del frío decorado que me pareció ver en casi todo el resto de la ciudad. 

Me gustó conocer a Mamá Esperanza, la mujer que atendía en el hotel donde me alojé, y las historias que contaba. Entre ellas, su vivencia del terremoto del 76, que sacudió todo el país y se llevó por delante a 23.000 personas e hirió a otras 76.000. También algunas anécdotas de su infancia y otras más recientes.

También a Leonel, un jovencísimo numismático salvadoreño, apasionado no sólo por la monedas sino por las antiguedades en general, con el que tuve algunas agradables e interesantes conversaciones.

A Mazatenango fui con Carlos, el amigo de Ire que me alojó en Panajachel. Cuando llegamos a Mazate caía el diluvio universal. Parece ser que en esta época del año diluvia casi a diario. Vinieron a recogernos David y otro chico de la Asociación Payasos y nos llevaron a casa de Lucía, también de la asociación, que fue quien nos alojó. 

Al día siguiente y el de después viajamos en pick up con el grupo de payasos de Mazate a dos centros de salud de la zona. Igual que el grupo de Luces Escondidas en la zona de Sololá, este equipo de la Asociación Payasos trabaja en prevención del VIH usando lo escénico como herramienta principal. El estilo de este grupo es menos teatral y más circense y echan mucha mano del clown y los malabares entre otras cosas. Su espectáculo se llama Payasadas contra el VIH y está divertido e interesante.

Se me volvió a estropear la cámara de fotos y no tengo imágenes de los días de Mazate. De Antigua sí tengo. Ahí van algunas...



Entre cliente y cliente Juan practica a la guitarra los temas que toca después en las celebraciones del culto evangélico. Me cuenta que es muy creyente.


Artesana teje en la tienda donde vende las maravillas que fabrica


Mercado


De la exposición Agua, Ríos y Pueblos


La admirable lucha por el agua de las mujeres Mazahuas, de México


 Recuerdo terrible de la masacre de Chixoy


Calles de Antigua









1 comentario:

  1. Es una descripcion muy real, me gusta. Las fotos muy bien logradas. No conocí el mercado, creo que lo que más me gustó, fue ver a las mujeres indigenas vendiendo y riéndose entre ellas, con sus bebes cargados en una especia de guayal. Su risas y la conversación cotidiana, le dan un toque y un significado unico a su mundo...

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